La
superación personal es un proceso de transformación y desarrollo, a través del
cual una persona trata de de adoptar nuevas formas de pensamiento y adquirir
una serie de cualidades que mejorarán la calidad de su vida.
Mediante la
superación personal el ser humano puede alcanzar un estado de satisfacción
consigo mismo y con las circunstancias físicas y emocionales que lo rodean,
para así poder disfrutar de una vida mejor, y al decir una vida mejor no me
refiero a una vida con más comodidades materiales, aunque estas pueden ser un
resultado del cambio personal, sino una vida evolucionada libre de jaulas, esas
jaulas que nos imponen las ideas y los sentimientos erróneos, ficciones que
crea nuestra mente y que les da tanto poder que se convierten en monstruos
reales.
Parece
mentira, pero somos nosotros mismos quienes conspiramos en contra de nuestra
superación personal, nos dejamos llenar de sentimientos de angustia, temor, ira
y desilusión, como si no tuviéramos ningún control frente a ellos, como si no
pudiéramos decir "ya no voy a sentir esto y punto". Nos dejamos
inundar de miedos y los encubrimos con excusas, con esperanzas vanas, esperando
el momento adecuado, el minuto perfecto para cambiar de vida y entonces ese
minuto nunca llega, lo que arriba es la pereza, el pesimismo y las
postergaciones propias del espíritu conformista.
Desde cuando
estás hablando de tus planes y de los deseos por darle un nuevo rumbo a tu
existencia, sin embargo, todo se queda sentado en las palabras, sílabas muertas
que argumentan porque no se pudo hacer esto o lo otro. Qué pasa con ese negocio
que desde hace tiempo quieres emprender; qué pasa con esas clases que necesitas
tomar; qué pasa con esas notas que desde hace tiempo debes sacar; qué pasa con
ese trabajo que sueñas conseguir; esos proyectos de los que has imaginado
tanto; o esa dieta que necesitas empezar.
La
superación no llega por si sola, un día no te despiertas y descubres "ah
que bien, soy una persona diferente", no, quien te quiere vender esa idea
te está dando frutas podridas en lugar de frescas; la superación personal
requiere acciones concretas, el simple deseo no basta, se necesita planeación,
esfuerzo, trabajo continúo, resistencia.
Llegar a
convertirse en una persona evolucionada no es un proceso fácil. Implica dejar
atrás muchas formas de pensamiento y comportamiento que se han ido adquiriendo
con los años. Todo este proceso de cambio en busca de la superación es duro
pero también maravilloso porque lo que tratamos es de renacer a una nueva
realidad, a un individuo nuevo que ha logrado una evolución en su actitud
frente a la vida.
No pienses
que vas a encontrar un cambio personal con la adquisición de bienes materiales;
tener nuestras cositas es muy lindo, muebles, ropa, una casa, pero te aseguro
que nada de ello te hará un mejor ser humano, las cosas materiales son como
esparadrapos, te cubren la herida pero no te la curan, y nunca podrás ser feliz
entre casas y carros hasta que no hayas evolucionado espiritual y mentalmente,
hasta que no hayas resuelto tus íntimos conflictos personales.
La
superación personal no es exclusiva de una determinada edad; jóvenes y personas
mayores -hasta muy viejitos- son capaces de lograr grandes empresas, de cumplir
grades sueños, sin detenerse a dudar por la falta de experiencia o por el
desgaste natural que traen los años.
Estoy segura
que estas páginas de Tu Superación Personal te van a ayudar, mostrándote
algunas de las conductas negativas que debes evitar y otras positivas que debes
cultivar. La decisión de evolucionar es tuya y está a tu alcance. La superación
personal duerme en ti, despiértala ahora.
No hay comentarios:
Publicar un comentario